jueves, 16 de diciembre de 2010

Topeyes es el nombre de un caserio del municipio Siquisique,  distrito Urdaneta del estado Lara,  situado al sur del caserio Sahoa .  Al este de la quebrada del Chorrerón,  Macuere al sur y al  este el cerro de la  Maporita o tres colores y Agualinda.  Parte del caserio está en la región montañosa del Mamporal del sistema Coriano.  Pertenece a la hoya hidrográfica del estado Lara que lleva su nombre.  Por ser montañoso en su totalidad,  el clima es templado,  existiendo partes mas altas,  donde se apreciaba  páramos ,  es decir lluvia de las hojas de muchos  árboles en algunos meses del año. Por su orografía la mayoria de su territorio, son serranias,  por tal motivo estaba  surcado de caminos de recua o caminos reales donde solo transitaban  arreos de burros,  mulas y caballos.  Estos caminos comunicaban a Churuguara, del estado  Falcón por un camino real que pasaba por las montañas del Cedro,  el Tun Tun, Sahoa,  Murende,  Agua Salada,  la Sebolleta hasta salir a la carretera Churuguara-Urucure.  En Churuguara  se compraba los artículos de primera necesidad como papelón,  sal,   kerosen,  velas,  jabón,  ropa, alpargatas,  cobijas,  utensilios de cocina,  medicinas como las pildoras del doctor Roos,  el Bermifigo para las lombrices, el aceite de Risino,  el Lacsol,  el aceite de bacalao para el apetito,  el aceite de tártago, Bioglobina para las embarazadas,  Ceregén para el cerebro,  Tabanuco para la tos,  Ceregumil para los convalecientes,  para la limpieza el jabón de la tierra,  Crema Egipcia para las pecas,  polvo Sonrisa en sobresito,  perfume Tabú.  También se compraba pan o amasijo dulce y salado,  paledonias. 
También en Churuguara se vendía lo que se producía en Topeyes como café,  que era lo que más se cultivaba maíz, yuca,  guaje,  guate  caraotas negras,  chivatas,  frijoles,  cambures.  Esta actividad agrícola fue decayendo por los cambios climáticos en la región,  y las familias comenzaron a emigrar y así fue como desaparecieron los cultivos.  Es de hacer notar que la actividad agrícola se hacía de manera rudimentaria en casi todos los  aspectos , es decir tala, quema y conuco.
Topeyes se comunicaba con Macuere por dos caminos caminos reales,  uno por Volveré y otro por los Picachos,  pero éste era muy estrecho por lo cual sólo se podía transitar a pié.  Se iba a Agualinda y Maroroy por un camino real que pasaba por el Sarataco,   nombre éste de una agua salada que existía en el lugar.

El intercambio de productos agrícolas también se hacia con Siquisique,  pero a menor escala que con Churuguara,  pues éste estaba más lejos.  Para ir a Siquisique,  se podia bajar a Macuere,  de aqui habia un camino real  que pasaba por la Torta,  el Chorrerón,  el cerro los Sajaritos y la quebrada de Coro, hasta llegar al  pueblo.  Aqui se compraba las mejores alpargatas,  que era lo que se usaba en la época,  los chinchorros de isotopos,  los sombreros de cogollo,  sacos de sisal,  marusas,  mecates,  los budares de barro,  las tinajas,  ollas y chirguas de barros.  Tambien artículos de cuero como correas,  corrreas con chacaras incorporadas, sogas de cuero,  jamugas,  aperos,  sillas de montar, machetes,  escardillas,  picos,  cuchillos,  navajas,  alambre de púas,  chimo, tabaco en manilla,  caramelos que venían en  envases de lata, etc.
Tambien se podia ir a Siquisique por el camino real vía Caujarao, siguiendo al Chorrerón, la Torta,  las Veras,  Cerro el Indio o Cerro los Sajaritos hasta bajar al pueblo.
A Aguada Grande se iba pòr Macuere,  pasando el río,  se tomaba el camino real  de la Venta, el Carmen,  hasta encumbrar el cerro Copey y asi  se llegaba al pueblo,  no existía  mucho intercambio de productos porque  estaba muy distantes,  en este pueblo se  hacia el famoso pan de aguada grande,  hoy industrializado.
A  Barquisimeto se iba via Churuguara, via Siquisique o via Aguada Grande.
En Topeyes no existieron los servicios públicos como tal,  era una odisea aprender las primeras letras,  ya que no existió una escuela como tal,  por lo tanto habia mucho analfabeta, no es sino hasta mediados de los 50,  cuando existió una,  en casa de unos vecinos en Caujarao, es decir que nunca hubo  una  sede.  Antes de esto hubo una persona  de nombre Egmundo Pacheco, que  daba clases en su casa,  vía Las Tinajitas,  cerca de Guiadú,  los interesados iban, pero tenian que caminar varias leguas.
Los nacidos en Topeyes los mandaban a presentar a Siquisique,  pero no con la rigurosidad del caso,  por eso hubo y hay muchas personas que no tuvieron partidas de nacimientos. 
La autoridad la ejercia el jefe de Caserio,  y su misión más importante era la recluta para la época.
Los enfermos graves los trasladaban en hamacas como ambulancias, e iban  a Churuguara o Siquisique según el caso.  Por  la época habia muchos curanderos con solo ver las aguas, es decir  el orina y con esto recetaban y curaban muchas enfermedades.
Por la década del 50,  hubo una persona  de nombre Toribio Salero  autodidacta en medicina, especialista en la cura de picaduras de culebras,  que abundaban mucho en la zona,  tambien curaba otras enfermedades como el paludismo,  parasitosis,  úlceras ,  etc. 
Para ayudar el nacimiento de los niños  existía las comadronas,  siendo una de ellas Foncha, esposa de  Hiliaron Cordero.
Los muertos los enterraban en un cementerio que estaba en una cumbre de Topeyes,  al lado  del camino real,  éste se llamaba  El Telechal.  Todos los habitantes  del caserio,  se daban cita los dos primeros días del mes de Noviembre,  para homenajear los difuntos en esos dias,  se limpiaba el campo santo,  se le  traían coronas o guirnaldas,  hechas con vejucos,  papel crepe, hilo y engrudo hecho con almidon de yuca.  Estos dos dias  se acostumbraba dar la llora,  que consistia en dar cambur,  panocha,  chicha de maíz,  etc. algunos preparaban una mesa ful de comida simple,  se empezaba a comer alas 5 am. con todos los invitados.
Los racimos de cambur se debian cortar el 24 de Octubre día de San Rafael.  A este camposanto venia gente de otros caserios, como Macuere,  Sahoa,  Agua Linda y las Tres colores.
Todas las casa eran de bahareque con techos de paja,  sisal,  tablas o tejas los más pudientes, pisos de tierra en su mayoria,  algunas de ladrillos,  pero muy escasas. Todas las casas tenian una troja,  que servía de granero y abajo de esta troja,  el fogón que podia estar en el suelo o sobre una trojita especialmente pàra ello,  las  piedras eran las topias,  entre lazadas con los palos de leña para el fuego,  que servia para cocinar. En la cocina estaba la piedra de moler el maíz,  para hacer la masa y luego las arepas. Habia una piedra para moler el café,  una vez tostado,  otra piedra para moler los aliños. Tambien habia en la cocina un tinajero con su respectiva  tinaja de barro,  para el agua de beber. En el corredor,  que lo tenian casi todas las casa habia un pilón para el maíz.
El  agua  para tomar se buscaba en barriles,  taparas,  chirguas,  camuras y tinajas,  quienes tenian burros de cargas,  los utilizaban con ese fin. Las mujeres y los muchachos eran los encargados de hacer esta rutina. En las quebradas se bañaban,   lavaban y le daban de beber a los animales,  como burros,  mulas,  caballos,  yeguas,  vacas,  etc.  Los sitios preferidos para buscar agua fueron,  la Duranera,  que  era un manantial,  la Chaqueta,  que era otro manantial,  el más famoso fue El Tural que estaba enclavado en una espesa montaña,  era una aqua dulce y criatalina. Otros buscaban el agua en el Curubo y otros en los chorros. La gente de Caujarao la buscaba en la Vega y en la Toma.
A  finales del siglo (XVIII)  y principios del siglo  (XIX), la  mayoria  de los habitantes de este caserio,  pertenecian a pocos apellidos y en épocas anteriores,  es decir a finales del 1890,  habia la familia de don Pedro Salazar  hombre rico,  dueño de haciendas  de caña y café,  con trapiches  y grandes sembradios de maíz y caraota negra. La mayoría de los habitantes pobres de Topeyes,  eran sus peones,  le trabajaban por tarea (12 varas por 3 varas era una tarea) o por ajuste.  Este señor compraba las cosechas a precios irrisorios.
Don Pedro Salazar construyó un palacio para la época,  llamado el paraíso,  tenía grandes salones y un balcón,  que lo llamadan el balcón de (Don Pedro),  de éste se divisaba todo Topeyes,  Macuere,  El cerro de Aguada Grande,  El cerro de los Sajaritos y el cerro del Manporal;  en este casona cuentan que se hacían grandes fiestas,   bailes y celebraciones, luego vino la decadencia  y  por la época del 50 todavia se apreciaban las ruínas.
La familia de los Querales forman otra cantidad de habitantes,  estos se fueron mezclando entre si,  con indígenas y españoles Canarios, y a finales del siglos (XXVIII),  constituía una gran comarca más o menos en este orden: Eliseo Querales con Emilia Loaiza formaron un hogar de 8 hijos.  Asunción Cordero con Chaína Querales formaron una familia de 6 hijos. Torcuato Querales con Sixta Querales forma su núcleo familiar de 6 hijos.       Amanda Querales se casa con Roseliano Suárez y tines 8 hijos.  Carmen Querales se casa con Rafael Cordero y tienes 8 hijos. Genova Querales se casa con Venancio Cordero y  forman su hogar con 7 hijo.´ Columba Querales tiene 4 hijos de padres diferentes . Sara Querales se casa con Rómulo Cordero y tiene 7 hijos.  Angelina Querales tiene 3 hijos.  Cantalicia  tiene 1 hijo.  Antonio Querales se casa con la Chiche y tienen 6 hijos.  Zenón Querales se casa con Josefina Granda y tiene 6 hijos.  Silvestre Querales con Carmen Cordero y tienen 3 hijos.  Manuela Querales se casa con Francisco Rodriguez y tiene 4 hijos.  Moisés Querales se casa con Asunción Riera y tienes 3 hijos, ésta muere y se casa con Nathalia Pulgar y  tienen 5 hijos.
Por los lados del Sarataco forma el hogar Francisco Gallón,   hijo de José Gallón que a las vez era hijo de Asunción Querales,  con una Índia Gallon,   éste  se casa con Luisa Lugo de Maroroy  y tiene 5 hijos. Por este sector vía Agua Linda estaba la familia de Rafael Perozo.
Por los lados de Caujarao estaba la casa de Pedro Cordero,  la  casa de  de Leonardo Cordero, la casa de Rómulo Cordero y Dámaso Cordero,  la casa de Hilarión Cordero,   la casa  de  Otilio  y familia,  la casa de los Alvarado conocida como las Delicias.
Por los lados del Jovito,  estaba la casa de los Pacheco,  Tobias,  Egmundo y Chilo,  quiénes a finales del siglo XIX,  se convirtieron en terratenientes,  dueños de casi todos los terrenos que fueron adquiriendo,  a medida que  sus dueños fueron emigrando. Estos  señores tenian haciendas de ganado,  plantaciones de café, agua,  plantaciones de cambur, etc.
Por los lados de la Parire,  estaba la familia de los Lucena,  por los lados del Curubo estaba la familia de Polonio Sánchez y Ramona Lucena,  por la montaña del Tun-Tun y por Cedro estaba la familia Campos,  la familia Saavedra y la familia de Benigno.
La casa que estaba en la parte más baja de todo Topeyes, era la de Torcuato Querales y el sitio lo llamó San  Rafqael de Onoto,  situado cerca de la  quebrada el Chorro.
Es de hacer notar  que toda estas  familias eran trabajadoras, sin bienes de fortuna,  a excepción de los Pacheco,  algunos Cordero,  algunos Alvarado,  pero los Querales casi no poseíron fortunas.
Desde tiempos antiguos,  se acostumbró hacer un ritual indígena,  conocido como el baile de las turas en honor a los duendes,  para darles gracias  por la abundancia de las cosechas,  las cuales se representaban en un altar y en el patio de la casa,  se plantaban las diferentes matas de la cosecha,  se hacia una  danza alrededor de esas matas con un capataz como guía,  al son de la música de la tura,  la maraca y las cabezas de venado con todas sus carameras. La bebida era el carato de maiz que lo ponian a fermentar en grandes canoas y tinajas,  la servian colectivamente en unas jarras de barro,  las cuales iban pasando de mano en mano.  La comida debia ser sin sal, una de las últimas turas fue en casa de  Otilio a mediados de los 50,
En  Topeyes se acostumbró mucho el convite,  el cual consistía en invitar a varias personas para hacer una actividad colectivamente,  podia ser hachar,  limpiar,  cosechar, etc .  para lo cual se hacia una tinaja de carato de maiz,  esa era la  alimentción de las horas trabajadas.
En la parte social se hacian grandes fiestas en casa de algun vecino,  para festejar un nacimiento,  una echada de  agua,  un bautizo o un matrimonio ,   éstos se hacian por la iglesia en las fiestas de Las Tinajitas o en las de Aregue. Muchos matrimonios se hacian en Churuguara o Siquisique .  Para los bailes la música era de cuerda,  los pisos generalmente de tierra.  A mediados de los 50,  Sillvestre Querales llevó una vitriola,  con discos de acetato y de esta forma cambio el ritmo de muchos bailes.
Esta página tiene como finalidad rendir tributo a esa gente trabajadora,  honesta y humilde que nació,  se crió y se murió en su caserio,  pero dejó una desendencia que emigró y se deseminó por toda Venezuela y el mundo,   formando parte del gentilicio de muchas regiones,  pero sus raíces ancestrales estan en este caserio. Esta idea es de un hijo de esas tierras que desea que todos los hijos   y sus desendientes, lean  y la  recomienden  a sus desendientes. Cualquier comentario es útil para enriquezer esta crónica. Gracias...







 

3 comentarios:

  1. Mis abuelos eliseo Querales y Emiia Loaiza...me encantó leer más de mi familia ..quiero ir a topeye...culo sería el mejor camino para llegar ahí?

    ResponderEliminar
  2. Hermoso homenaje a la tierra de los antepasados

    ResponderEliminar